La cultura del vino en España y su aplicación en el turismo, Francisca Ramón Fernández

Por lo que respecta a las actividades y oficios y los elementos que intervienen en el procedimiento, el Decreto 120/2018 nos menciona los siguientes: la uva es la moscatel, variedad Alejandría. Se utiliza un horno de escaldar, además de la caldera, que es de cobre cobre o hierro fundido, con varias capacidades dependiendo de la necesidad productiva, con un borde para ser encajada en el horno, y dos asas para su manipulación. La lejía se utiliza para cortar la piel de la uva de moscatel, elaborada con las cenizas, normalmente, del sarmiento de la vid, cal y agua. Las hierbas panseres (jolivarda/olivarda, botja rossa) se utilizaban, una vez vertida la lejía en la caldera, para dar color a la uva que se escaldaba. En los últimos tiempos se sustituye este producto por sosa cáustica. El cazo y cacillo son cesta de alambre con mango de madera para aislar las manos del escaldador de la fuente de calor; la segunda, más pequeña servía de espumadera, con raqueta de alambre y mango de madera. También se usaban las cacillos de mano, sin mango. Los cañizos son bases rectangular realizada con cañas y atada con alambre para extender la uva escaldada y facilitar su traslado y secado. Los pilones eran elementos de madera de higuera, habitualmente, o incluso de barro (como los fabricados en Orba), cúbicos y en menor medida cilíndricos, utilizados para apilar los cañizos y evitar así aplastar la uva durante el secado. En la Vall de Xaló se usaban los «llistonets». El riurau (risau, rirau) es la estructura arquitectónica tradicional en planta baja, con cubierta de teja, adosado o exento (una o dos vertientes), que para facilitar el paso con los cañizos se abren con una sucesión de arcos, denominados «ojos» a un lado o a ambos, y así poder albergar los cañizos repletos de uva escaldada protegiéndola de la lluvia, el rocío y la humedad. A veces, dentro de los riurau, también había estufas. El secadero es la extensión del suelo alrededor del riurau para extender los cañizos con uva escaldada y exponerlas al sol. Las veles y bous eran estructuras de madera ancladas en la tierra con forma de horca con largos largueros que forman una cadena sobre las que se despliegan las velas de tela impermeable para proteger la uva escaldada, de manera parecida a la protección que da el riurau. El proceso se realizaba siguiendo unas fases que explica el Decreto 120/2018:

RkJQdWJsaXNoZXIy MTE4NzM5Nw==